Este pequeño licénido, con unas alas anteriores de
apenas dos centímetros de longitud y una envergadura inferior a los cuatro
centímetros, coloniza los prados floridos, los bordes de los caminos y los claros
de bosque de la práctica totalidad de la Europa continental, aunque en la
actualidad no es muy abundante en la Península Ibérica, ya que su
población ha decrecido notablemente en las últimas décadas, propagándose
principalmente por la mitad norte. También está presente en Asia, el Cercano
Oriente y algún país del norte de África (Marruecos).
No suele ocupar los espacios situados a más de dos mil quinientos metros de altitud.
La oruga se alimenta principalmente de plantas del
género trifolium.
El dimorfismo sexual se manifiesta en el anverso
alar, de color azul en los machos y marrón en las hembras.
En: perdidoenelamazonas.blogspot.com.es
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